CUATRO NAGUALES QUE RESULTARON TRES

En mis ya 23 años de andar en los caminos del nagual, sólo he conocido a 4 naguales, que resultaron ser tres. Me explico; y lo hago en orden de interacción con ellos, de menos a más.

El primero es de origen maya. Tuve esporádicos contactos con él y le perdí la pista hace como 4 años después de que una tarde me llamó de su pueblo diciéndome "¿estás listo?" y yo no lo estaba. Después comprendería que esa misma noche (en caso de estar listo) tendría que haber hecho mis maletas y lanzarme al pueblo donde él me estaba esperando para comenzar mi aprendizaje en su linaje. Nunca más me contactó.

Al segundo lo traté más seguido y esporádicamente, a través de este medio nos comunicamos. Ahora anda en Chile y México, alternativamente. Un verdadero poeta-nagual o viceversa, no importa. Una persona fina, tremendamente poderosa, cauto y prudente. Se desliza como jaguar en la noche. Gran amigo, nos profesamos admiración mutua. Tiene una enorme cohorte de gente que verdaderamente lo ama.

Con el tercero llevo una gran amistad e interactuamos frecuentemente. Para mí, la persona más inteligente y culta que he conocido. Un verdadero maestro. Humilde, entregado, siempre tiene la respuesta más adecuada. Tremendamente honesto, pone en práctica lo que dice. Maestro de Ensueños.

El cuarto, paradójicamente, no lo es. Y lo supe por interactuar también con él no sólo a través de este medio sino en la vida cotidiana. Nunca ha podido mostrar su nagualidad, si se me permite el término. Actúa diametralmente opuesto al nagualismo verdadero y lo principal que lo distingue de los otros tres: se autoanuncia como nagual, cosa que aquellos nunca han hecho. Con gran esfuerzo, muy, pero muy a regañadientes, si le concediera el beneficio de la duda, éste sería un nagual, pero de los malignos, perversos y destructivos, los cuales bien describió Fray Bernardino. 

He conocido mínimo unos 4 más, todos autonombrados naguales. Ninguno vale la pena.