El Espíritu es un potencial de realización. Está ahí, donde todos los potenciales, esperando a ver si alguien le presta atención y lo actualiza.
Para entender al Espíritu hay que Ver, y para Ver, hay que cambiar conciente y deliberadamente el estado de la conciencia (y no basta con fingir que meditamos o vocalizamos un poquito, tú entiendes).
Sólo esa posición perspectiva nos permite percibir realidades de orden superior, es decir, más integradas.
Para entender al Espíritu hay que Ver, y para Ver, hay que cambiar conciente y deliberadamente el estado de la conciencia (y no basta con fingir que meditamos o vocalizamos un poquito, tú entiendes).
Sólo esa posición perspectiva nos permite percibir realidades de orden superior, es decir, más integradas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
"Que tu comentario sea respetuoso; que tu crítica sea constructiva..."